Está aceptado, que el primer núcleo poblacional que se formó en la hoy denominada “Isla Baja” fue el de San Pedro de Daute, enclavado sobre un promontorio situado a occidente de la bahía de Garachico. Por los primeros libros del Cabildo tinerfeño, sabemos que en San Pedro existía desde 1.509 una iglesia y que en el año 1.514 se creó en ella una parroquia, bajo la misma advocación, a la cual se le designó “Cabeza del Beneficio Eclesiástico de Daute”.

Se trata de una desarrollada ermita con capilla mayor diferenciada, y en la que se pueden contemplar algunas imágenes de cierto mérito artístico, como, por ejemplo, la excelente talla de Nuestra Señora de la Concepción, de pequeñas dimensiones, obra catalogada de la escuela andaluza del siglo XVII; de iguales dimensiones es la imagen de San Pedro Apóstol perteneciente al taller isleño de la misma centuria. Citar, asimismo, las imágenes de vestir de Nuestra Señora de la Paz, San Blas y la titular, sedente, de estimable antigüedad.