Este tramo de acantilado y su pie de monte asociado, albergan un interés ante comunidad residual de bosque termófilo, constatándose magníficas poblaciones de almácigos, palos de sangre, etc.

Entre la flora destacan muchas especies protegidas y endémicas, y unas pocas amenazadas como la chahorra (Sideritiskuegleriana) y el cabezón (Cheirolophuswebbianus).

Por otro lado, todo el acantilado representa un flanco escénico para la isla baja, de gran valor estético. Es reclasificado a su actual categoría por la Ley 12/1994, de 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias. El sitio es por definición área de sensibilidad ecológica en toda su extensión, a efectos de lo indicado en la Ley 11/1990, de 13 de julio, de Prevención de Impacto Ecológico. Se trata de un espacio de alto valor paisajístico, desde el que se tiene una amplia cuenca visual y percepción panorámica del territorio Fragilidad ecosistémica y paisajística. En la parte alta de Interián se encuentra un caserío perteneciente a Tierra del Trigo por donde discurre una carretera que baja por el acantilado hasta las cercanías de Las Cruces. Dicha carretera atraviesa el sector donde se ubican las mejores comunidades de almácigos, palmeras y barbusanos de toda la zona protegida.

Carece de señal ética y puntos de información. La propia ausencia de planeamiento está generando algunos usos inadecuados dentro del Espacio Natural Protegido Establecimiento de rutas con fines científicos y /o educativos. Paraje en el que se conserva un ejemplo de lo que fue un bosque termófilo. Posibilidad de cometer acciones de repoblación y recuperación del bosque termófilo en determinados sectores del mismo. El estado de tramitación del instrumento de planeamiento (Normas de Conservación) se encuentra en Aprobación Definitiva.