En este espacio se encuentran las mejores muestras de pinar y vegetación de alta montaña de Tenerife. Las cabeceras de buena parte de los barrancos que forman la red de drenaje de la vertiente Norte y Sur de Tenerife también se ubican en él. Tiene una función importante en la captación de aguas y la conservación de suelos.

La flora y fauna cuentan con una biodiversidad endémica importante, entre la que se encuentran varias especies amenazadas y muchas protegidas, tanto por la legislación nacional como por convenios internacionales.

También cuenta con la presencia de elementos geomorfológicos importantes (barrancos, pitones o lavas recientes). Es un espacio de gran valor paisajístico.

Ha sido reclasificado a su actual categoría por la Ley 12/1994, del 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias.

Ha sido reclasificado a su actual categoría por la Ley 12/1994, del 19 de diciembre, de Espacios Naturales de Canarias.

Es un espacio con alto valor paisajístico, desde el que se tiene una buena percepción panorámica del territorio. La variedad de paisajes que se pueden encontrar dentro del Parque le confieren un alto poder de atracción.

Esta amplia superficie de pinar canario constituye el área boscosa más importante de Tenerife.

Posee las siguientes limitaciones:

• Ciertas actividades en estos espacios entrañan problemas por el riesgo de incendios, por lo que se permiten en áreas restringidas.
• Fragilidad ecosistémica y paisajística en determinados lugares.
• El estado de tramitación del instrumento de planeamiento (Planes Rector de Uso y Gestión) se encuentra en Fase de Avance.
• Potenciar las características naturales del Parque, junto con la conservación del patrimonio arquitectónico y etnográfico, ya que son elementos de gran interés para un turismo que demanda este tipo de valores.