El origen de la festividad de San Roque se remonta a principios del siglo XVII.
Es una festividad cuya celebración tuvo siempre una distinción especial, un desarrollo que nada se parece a la de San Roque. La del Santo, multicolor y bullanguera; la del Cristo, comedida y con un selecto programa de actos que la han venido situando en el polo opuesto de la anterior.
En cada núcleo del municipio y en cada parroquia se celebran festividades que atraen a numerosísimos asistentes.